Cuando
ella lo conoció a él…
Bueno,
nos ponemos ruborizadas, es increíble cómo nuestro corazón enloquece y nuestro
cuerpo nos traiciona. Queremos disimular pero el muy pendejo comienza a mirarle
fijamente, en busca de disimulo (pero ni modo), le sonríe levemente y cuando es
bien atrevido hasta nervioso se pone, es horrible!! Una cree conocer cada
fracción de su cara, cada rasgo, cada expresión…pero ahora todo se burla.
La
chica consigue al chico (porque ya no estamos de que nos socorran y esas
bobadas. Ahora se habla bastante del siglo XXI y de que las mujeres
revolucionarán el mundo, y un sinnúmero
de cosas mas que solo escucho repetir a las mujeres) o quién sabe si ambos se “consiguieron”.
Pasó la etapa del flirteo e inician juntos ese mágico recorrido de lealtad, amor
y compromiso. Todo va bien, todo es genial. Naturalmente los primeros meses
todo es color de rosa, sí o sí chicas?
Nos llaman de vez en cuando, nos hablan todo el santo día, nos empalagan con
frases como: “Te quiero mucho”, “Eres lo mas bello”, y los muy “bárbaros”
hasta te tiran un “Me estoy enamorando”. Aquí
en lo personal, les cuento que esos son mis preferidos, los estudio muerta de
risa.
Siguen
juntos. ¡Les digo, todo va divino! No son de las parejas que pelean y si lo
hacen son peleas poco frecuentas que no duran mas de treinta minutos. Tampoco
se insultan, porque la verdad es que se quieren y respetan mucho. El "pero" en
todo esto no viene dado por las peleas, por las posibles infidelidades o porque
con el tiempo se canse el uno del otro, no, qué va.
…
Pero
no seamos injustas, nosotras también llamamos con frecuencia y se nos entra una
“preguntadera” irracional que les cuento, vuelve loco al mas cuerdo. Ahí es que
somos expertas, no solo nosotras sino todo humano, en ser masoquistas,
terminamos enterándonos de cosas que posiblemente (bueno, dejemos la
condescendencia para otro artículo), ciertamente nos lastimarán. Aparte somos
bien complicadas porque le decimos a nuestras amigas el típico: “Me habla a
cada momento”, ¡Ay! Pero que ni se le ocurra dejar de dar los buenos días y las
buenas noches porque nos ponemos, en un criollo venezolano; cuaimas, cuaimas.
…
Ahora
hablemos del "pero" que todos quieren saber. Resulta que se quieren y se
“necesitan” tanto que el amor que se solían tener ya no es un amor limpio y
sano, ahora es un amor tóxico y egoísta cuya contaminación los va asfixiando gradualmente. No lo reconocen a la primera porque al final de cuentas digamos
que sigue siendo amor, por lo que los pulmones deciden aguantar un poco mas de
humo.
Siempre
estan en contacto, no tienen tiempo ni para hacer sus quehaceres, para ocuparse
de ellos mismos o de sus propios intereses, se olvidan de construir su propia
obra maestra. Acordaron no salir si no va el otro, tienen los mismos amigos en
común, ya no conocen gente nueva cada quien por su lado porque ese “por su
lado” solo conduce a un mismo camino, el de ambos. Él
le pertenece a ella y Ella
le pertenece a él.
Sin
darse cuenta toda su existencia gira alrededor de su pareja y fuera de ella nada tiene sentido. Nos olvidamos de nosotros mismos, nos alejamos de quienes
somos y nos ponemos a los pies de alguien mas. Siempre he dicho que no hay peor
desgracia que cuando la gente no sabe a dónde va. Y es que cuando estamos en
ese tipo de relación vamos hacia donde nos lleven, no andamos mas por nuestra
cuenta, nos van quitando la fuerza, las ganas, las oportunidades, los sueños,
todo nos vale…nos roban el tiempo.
Es
vital poder zafarse de este agujero negro disfrazado de escarchas, flores y
muchos colores. Porque siempre descubrimos nuevas formas de morir, pero esta,
es sin duda la mas triste de todas, morir sin darse cuenta, o morir con la ilusión
de que se esta viviendo.
Si
una relación no te suma tampoco permitas que te reste. ¡No te pierdas! ¡No permitas que te roben!
Brenda L. Hernández.
excelente articulo....... bastante real. Felicidades
ResponderBorrarGracias Pamela!! Un beso!
ResponderBorrarExcelente artículo. Verdaderamente este tipo de relación es que se trata de suplir carencias afectivas, pretendiendo que el otro nos de lo que nosotros mismos no somos capaces de gestionar.
ResponderBorrarExcelente... De veras que me dejo mucho que pensar, y si, es lamentable que aunque no queremos y pensamos que somos felices, simplemente disfrutamos de lo que no sabemos que nos esta haciendo daño.
ResponderBorrarSigue asi Brenda, mi apoyo, cuentas con el. :3
Muchas gracias Enmanuel!! Lo aprecio muchísimo!!
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